OPINIÓN || DONDE DIJE DIGO, DIJE DIEGO.



El pasado Lunes, se celebró en el magno Auditorio de Alfredo Krauss un encuentro del diario AS con representantes de la UD Las Palmas y el CB Gran Canaria. Una tertulia distendida de los principales representantes del deporte canario con los principales periodistas del 2º diario de tirada nacional con lo mejor (sic) de su redacción: Pedro Pablo San Martín, Tomás Roncero y su director Alfredo Relaño. De este último se pueden rescatar sus artículos siempre y cuando no hagan relación al "Villarato", pues es cuando cuelga sus hábitos de periodista y sale lo que siempre ha sido: un fiel seguidor merengue. 

Entre los invitados se encontraban Paco Herrera, Sergio Araujo, Juan Carlos Valerón y el propio Miguel Ángel Ramírez. El máximo responsable de la entidad amarilla tras ser interrogado por el precio de las entradas y a colación de la peor entrada de la temporada que se dio ante el Sabadell con poco más de 11.400 espectadores cuando hay realmente 15.000 abonados, afirmó lo siguiente: "Las entradas están acordes al presupuesto; [...] por el que se sume, porque quiere ver un partido, no puedo poner el precio en relación a ese aficionado. Premiamos la fidelidad. [...] No podemos tirar el nombre de este club ni faltarle el respeto a los abonados. [...] Si 15€ parece le parece caro, a ese aficionado de la UD Las Palmas le agradezco que sea de la UD pero que por la TV lo puede ver gratis."

Esas declaraciones, más típicas de una etapa anterior de Ramírez más propensa a la verborrea que la actual más comedida y diplomática, tan sólo han tenido 24 horas de vigencia. El club declaró el próximo partido en casa ante el Recreativo de Huelva como "día del abonado": una entrada por abono a precio económico. Si entrar en el interminable debate sobre el precio de las entradas, la realidad social y macro-micro y nano económica de nuestra región, sí cuestiono el repentino viraje dado por el consejo de administración.

Ramírez hablaba de proteger al abonado, una decisión lógica y loable con los aficionados que a comienzo logran poder hacer el sacrificio de pagar una cantidad importante de dinero para reservar su butaca  en un gesto de fidelidad inequívoco sin importar terceras variantes como los fichajes o los resultados, tan sólo el aficionado y su club. La relación ideal, línea directa de la grada al césped, sin interferencias. Hay muchos que por diferentes motivos queriendo hacerlo no pueden por cuestiones puramente económicas, y no por ellos se convierten en aficionados de segunda categoría respecto al primero. 

A mitad de temporada, y tras el derbi canario, el club comunicó una subida de precios no estipulada al comienzo del campeonato para paliar la merma de butacas disponibles debido a las obras en el estadio. Con el equipo afianzado en el liderato, las cuentas de la lechera salían fácil, pero no entraban en sus cálculos el desplome del equipo tras el 0-3 del Betis en el Gran Canaria. A partir de ahí, poco a poco la afluencia de fieles al coliseo de Siete Palmas se ha ido mermando hasta llegar a la cifra del Sabadell.  Cuando se decidió la subida de estos precios no se cuestionó los sentimientos del aficionado que llevaba pagando desde Agosto su entrada cada 15 días a un precio ya fijado ni si se pagaría 25€ por ver, por ejemplo, al conjunto arlequinado. 

Este fin de semana, la UD Las Palmas se la juega en una plaza complicada como es Butarque para después recibir al Recreativo colista. Mucho dependerá de lo obtenido ante el conjunto pepinero para ver la reacción del aficionado sin abono ante la promoción del "día del abonado". Aunque me temo que pase lo que pase la reacción no será llenar el Gran Canaria. Como estoy casi seguro que Ramírez estará en su despacho lamentándose de la reacciones del aficionado que se queja, si no es por el precio de las entradas, lo es por el mal momento del día del abonado. 

La ha faltado a esta Directiva seguir el consejo de Woody Allen: "No conozco la clave del éxito, pero sé que la clave del fracaso es tratar de complacer a todo el mundo.". Por tanto, subidos ya los precios, tirar hacia adelante con todo, pues virajes a mitad de camino de forma puntual son estériles intentos de conciliación que muestran inseguridad.

Volviendo al principio, si realizan un encuentro con periodistas de verdad como Enric González, Manuel Jabois o Jose Antonio Segurola, no se preocupen en avisarme, yo como haría una fan de One Direction estaré haciendo cola en las taquillas el primero. 

Foto Portada: ©UDLasPalmas.es

 Lea aquí la opinión de Fran Artiles, coordinador de GradaCurva.com, al respecto.
Previous
Next Post »